Todo lo que deberías saber sobre las lavadoras de carga superior

Una lavadora de carga superior es un electrodoméstico utilizado para lavar la ropa, que tiene un tambor central al que se ingresa por su parte de arriba a través de una puerta o escotilla, por medio de la cual se introduce la ropa a lavar.

El tambor de la lavadora se llena con agua mezclada con el detergente que se utilice, da un giro en los distintos ciclos del lavado y tiene orificios que asisten a la supresión del más alto de agua a lo largo de la etapa final de centrifugado de la ropa.

El movimiento del tambor es causado por un motor eléctrico. Los motores frecuentes están situados detrás y debajo del tambor de la lavadora y le comunican la tracción por medio de poleas y correas.

¿Cómo disponer tu lavadora de carga superior?

Tu instalación

Si tu instalación existe, debe ser en relación a la normativa, en caso opuesto, las conexiones a las redes hidráulica y eléctrica debe hacerlas un técnico preparado, acorde a las normas del constructor y a la normativa en vigor en temas de seguridad.

Las bridas de tu lavadora

El electrodoméstico está equipado con unas bridas de transporte para evadir algún viable inconveniente que se le logre provocar a lo largo de los desplazamientos. Es infaltante que retires todos los gadgets de custodia antes de usar tu electrodoméstico.

El ámbito de tu lavadora

Ubica tu lavadora en una cuarto al abrigo del frío, sobre un suelo chato y permanente. Ten en cuenta de que las 4 patas reposan de manera correcta sobre el suelo y que el electrodoméstico está bien nivelado.

La electricidad

Conecta siempre tu electrodoméstico a una toma de tierra. No uses ni alargadores ni regletas. Si creas tu instalación eléctrica: tienes que tener una toma de electricidad hermética conectada al circuito de tierra. No debe estar a menos de 0,60 metros de un punto de agua. Es obligación tener un disyuntor diferencial de 30 mA.

Entrada y retirada de agua

Si las conexiones de agua ya están previstas en tu vivienda, conecta el tubo más reducido a la tubería de agua fría y el más importante al sifón que une el desagüe. Si tienes que hacer el empalme, instala el electrodoméstico en una cuarto equipada con las canalizaciones primordiales (cocina o baño).

Un poco de fontanería

Las tomas autoperforantes aceptan disponer una lavadora sin la necesidad de usar las técnicas usuales de fontanería. Las conexiones con las tuberías se hacen muy ágil sin la necesidad de desarmar o cortar la canalización. Los grifos autoperforantes agujerean de forma automática la tubería de cobre a lo largo de el montaje.

Antes de utilizarla por primera oportunidad

Antes de lavar por primera oportunidad, ejecuta un lavado en vacío para limpiar el tambor y la cubeta echando una chiquita dosis de detergente y escoge un programa de lavado a 60ºC. Aprieta sobre la tecla de encendido/apagado de tu lavadora para hacerla andar.

Lo que no tienes que olvidar en tu instalación

Ubica bien el grifo de entrada de agua de tal forma que sea simple entrar a él en caso de necesidad. Comprueba que las tuberías no estén ni dobladas ni torcidas.

¿Cómo usar tu lavadora de carga superior?

Para lavar bien no la cargues bastante

Si apisonas la ropa en el tambor, te arriesgas a que se lave mal. Tienes que entender además que de acuerdo con la naturaleza del tejido, no tienes que llenar tu lavadora de la misma manera:

• Algodón, lino: tambor lleno pero sin sobrecargar.
• Sintético: tambor a la mitad de volumen (pues sí, 1 kg de acrílico es más voluminoso que 1 kg de trapos).
• Lana y tejidos delicados: el tambor a una tercer parte de su volumen. Si tu jersey tiene más espacio, va a existir menos roce y limitará el compromiso de desgaste.
• Por último, varía la carga en funcionalidad de la mugre de tu ropa. Disminuye la carga si está muy sucia.

En caso de duda, consulta el manual de normas de tu electrodoméstico y sigue las normas y consejos del desarrollador.

¿Lavar diferentes tejidos de forma simultanea?

Puedes lavar de forma simultanea tejidos con diferentes creaciones. Escoge un programa de lavado ajustado a las fibras más delicadas de la carga. ¡Para ello, comprueba las etiquetas, tienen dentro advertencias para proteger tus prendas preferidas!

¿Qué dosis de detergente?

Es inservible poner bastante detergente. Recuerda que lo que lava la ropa es la conjunción de la acción mecánica (el lavado de nuestras abuelas), del agua, del tiempo que dura el período de lavado…y el detergente. Este es simplemente un ingrediente de la fórmula mágica que limpia la ropa perfectamente. Impide echar dosis bastante enormes, no es bueno ni para tu piel ni para tu electrodoméstico. Respeta la dosis sugerida, o inclusive un poco menos.

Es bueno entender que tienes que dosificar el detergente en funcionalidad de la dureza del agua. Si es despacio, usa poco detergente, si es dura usa más. Infórmate en el servicio de organización de agua de tu red social o echa un ojo a tu factura, te pone la dureza.

En cualquier situación, usa menos detergente si lavas poca ropa o si no está bastante sucia. ¡Y ten en cuenta que la mayor parte de detergentes actualmente son concentrados, razón de más para no agregar mucho!

¿Debo poner el detergente en el cajón o de manera directa en el tambor de la lavadora?

En polvo, líquido o en pastillas, generalmente tiende a ser aconsejable echar el detergente en el cajón sosprechado para eso. Si usas detergente líquido con una bola dosificadora, puedes colocarla entre la ropa (en ese caso, no olvides seleccionar un período sin prelavado).

¿Tejidos delicados en la lavadora?

Las lavadoras recientes cuidan los tejidos más delicados. Hay para eso programas particulares, principalmente para la lana o la seda (algunos modelos perfeccionados proponen inclusive un programa de “lavado a mano”). En cualquier situación, la temperatura de lavado debe ser despacio y el ritmo en el momento de mover la ropa correcto a la fragilidad del tejido. De cualquier manera, antes de lavar a máquina tus tejidos delicados, comprueba siempre los consejos de lavado impresos sobre la etiqueta. Si únicamente facilita el lavado en seco, no tientes al demonio….

¿Cómo proteger tu lavadora de carga superior?

El exterior

Usa un paño despacio y húmedo para limpiar la composición y el display de tu electrodoméstico. Puedes agregar algo de limpiador líquido. Luego limpia tu lavadora con un paño despacio.

La junta de la puerta

Comprueba que no se haya deslizado ningún residuo en los pliegues de la junta de la puerta de tu lavadora. Tendrás la posibilidad de quitarlos de forma sencilla con un cepillo de dientes de pelo maleable. Ahora pásale un paño húmedo.

Cajón para detergente

El cajón para detergente se puede sacar en la mayor parte de modelos de lavadora. Puedes quitarlo de su habitáculo. Enjuaga cada compartimento con agua templada aparte del conducto por donde pasa el detergente. Con asistencia de un reducido cepillo quita los residuos de detergente resistentes. Seca el cajón para detergente con un paño antes de volver a ponerlo en su sitio.

El tambor

Para una aceptable higiene, deja la puerta de tu lavadora abierta luego de cada uso. La limpieza del tambor se ejecuta lanzando un lavado a 90ºC una vez al mes sin detergente ni ropa.

El filtro de la bomba

Si el filtro está debajo, detrás del rodapiés, tienes que vaciar el agua antes de limpiarlo poniendo un barreño en el suelo debajo de él. Desenróscalo sin quitarlo del todo, el agua sale sola. Entonces tendrás la posibilidad de sacar el filtro totalmente. Inclina sutilmente tu lavadora hacia ti para que salga toda el agua. Luego limpia el filtro y su cavidad descartando los elementos que hayan podido quedar retenidos (botones, monedas…) y comprueba que no quede ningún objeto dentro del filtro. Regresa a colocarlo y comprueba que está bien fijado. Si lo colocas mal puedes ocasionar fugas.

Si el filtro está al fondo del tambor, retíralo de su localidad siguiendo las normas del manual de tu lavadora. Límpialo sacando los elementos que se hayan atascado. Comprueba que habitáculo del filtro está limpio. Regresa a colocarlo.

Las tuberías de llegada de agua y los desagües

Comprueba regularmente que las tuberías de llegada de agua y los desagües no tienen fisuras ni están desgastados. De ser de esta forma, cámbialos por tuberías idénticas. Comprueba que están bien apretadas y que tienen juntas por los dos lados. Algunas tuberías de agua tienen un filtro anticalcáreo en el empalme de la llegada de agua. Contrólalo y límpialo según tu manual de normas.

 ¡Te simplificará la vida!

¿Por qué elegir un modelo de carga superior?

¿Tu baño es muy pequeño?

La lavadora de carga superior es más pequeña que la de carga frontal (entre 40 y 45 cms de ancho) y encaja mejor en los espacios reducidos.

¿Tienes la espalda débil?

Ya no necesitarás agacharte para llenar o vaciar la lavadora. Al tener la abertura arriba tus lumbares no sufrirán. Algunos modelos tienen incluso una función que permite que cuando el programa acaba, el tambor se pare exactamente en la posición de descarga. Ya no tendrás que moverlo, podrás sacar la ropa nada más abrir el tambor.

Además los niños no llegan al panel de control.

Capacidad

Todo depende de la composición de tu casa. Si vives solo no te servirá de nada comprar un modelo de más de 5 kgs. Por el contrario, si sois más de 4 en casa, no dudes en elegir un modelo de gran capacidad, de 8 kgs o más.

Te damos unas pistas:

• 4 kgs para un(a) soltero(a).
• 5 kgs para una pareja.
• 6 – 7 kgs para una pareja con 1 o 2 niños.
• 8 kgs o más para una pareja con 3 o 4 niños.

Debes saber: Los electrodomésticos de gran capacidad no tienen por qué ocupar más espacio que los estándar. La ventaja de los que tienen gran capacidad es que puedes poner menos lavadoras y lavar prendas grandes.

¿Por qué elegir una velocidad alta de centrifugado?

La velocidad de centrifugado es el número de vueltas que da el tambor por minuto. La velocidad media de las lavadoras de hoy en día es de 1400 vueltas por minuto y puede llegar como mucho hasta las 1600 vueltas por minuto.

Debes saber: cuanto más rápido es el centrifugado, más rápido se secará tu ropa, tanto en el electrodoméstico como al aire libre.

Más silenciosa que antes

Los fabricantes desarrollan electrodomésticos cada vez más silenciosos para hacerlos más discretos. Sistema anti vibración, mayor aislamiento, motor de inducción…tantas características que disminuyen los ruidos. ¡Buenas noticias! Hoy en día el nivel sonoro está regulado e indicado en las etiquetas energéticas de los electrodomésticos. De esta manera sabrás cuánto ruido hace tu electrodoméstico mientras lava y mientras centrifuga.

Nuestro consejo:

¿Tu lavadora está en una cocina abierta? Elige un modelo silencioso durante el lavado.

Tu lavadora está en el baño o en una habitación cerrada? Elige mejor un modelo silencioso durante el centrifugado.

Más ahorro

En 10 años el consumo de electricidad y de agua han disminuido un 35%. Gracias a la electrónica “inteligente” que analiza, regula y ajusta la programación de lavado durante todo el ciclo. La etiqueta energética regula este consumo.

• Clase A+: 10% de ahorro de energía en comparación con la clase A.
• Clase A++: 20% de ahorro de energía en comparación con la clase A.
• Clase A+++: 30% de ahorro de energía en comparación con la clase A.

Hoy en día, se indica en la ficha de cada electrodoméstico una estimación del coste de uso (agua + electricidad) por año. Este coste se basa en las informaciones que aparecen en la etiqueta energética multiplicadas por los precios medios de agua y electricidad que se aplican en España.

¿De qué sirve la función vapor?

¿Vas a planchar todas las camisas de la semana? ¿Quieres llevar una camisa recién sacada del armario y que no esté muy arrugada? Di adiós a los pliegues. La función vapor ventila, quita las arrugas, refresca y quita los olores de tu ropa. De esta manera consigues dividir en 2 o incluso eliminar el tiempo que pasas planchando tu ropa.

¿Y por qué no elegir una lavasecadora?

Algunos modelos combinan la función de lavado de una lavadora y la función de secado de una lavasecadora. Permiten secar aproximadamente 2/3 de la capacidad total del electrodoméstico. Las conexiones para este tipo de electrodoméstico son las mismas que las de una lavadora estándar. Es una buena opción para cuando te falta espacio.

Debes saber: la lavadora utiliza agua para el secado, por lo que su consumo de agua es superior al de una lavadora clásica en modo de lavado + secado.